El alcoholismo

El alcoholismo es una enfermedad que genera una fuerte necesidad y ansiedad de alcohol, de forma que existe una dependencia física y psicológica del mismo individuo, manifestándose a través de varios síntomas de cuando no es posible su ingestión. El alcohólico no tiene control sobre los límites de su consumo, que va en a medida que se desarrolla tolerancia a esta droga.​

Es considerada como una enfermedad crónica, y mortal por la Asociación médica estadounidense, igual que otras drogodependencias. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo determina como «toda forma de embriaguez que excede el consumo alimenticio tradicional y corriente o que los límites de las costumbres sociales...»

La dependencia del alcohol puede resultar de una genética, una enfermedad mental, el consumo de alcohol abundante, sostenido y abusivo o una combinación de estos . Esta enfermedad no solo afecta al adicto, sino también a la vida de todo que se encuentra a su alrededor. Investigaciones recientes sobre genética y neurociencia han identificado ciertas características genéticas que se cree que están con la dependencia del alcohol. Los investigadores continúan indagando del vínculo entre la herencia genética y el alcoholismo.

Actualmente no existe una posible cura esta enfermedad, sin embargo, muchos alcohólicos se mantienen sobrios por periodos de tiempo prolongados de acuerdo a su voluntad y compromiso para vencer esta enfermedad. Es innegable que, para que un adicto al alcohol recibir tratamiento y llegar a una posible recuperación, primero que aceptar su condición de dependencia.